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La fama repentina puede llegar a impactar de manera positiva en los jóvenes actores o actrices a nivel mundial, pero también puede generar consecuencias negativas, como la depresión, la cual puede llevar a una persona a querer quitarse la vida.

El actor irlandés, Devon Murray, quien tuvo su personaje en la saga de Harry Potter, interpretando a Seamus Finnningan, es un ejemplo de ello.

Murray confesó en redes sociales que estuvo sucumbido en la depresión durante 10 años, según indicaron en el Diario de Nueva York.

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“Llevaba diez años luchando en silencio contra la depresión y recientemente decidí contarlo, lo que ha supuesto una gran diferencia para mí”, dijo el joven en su cuenta de Twitter.


La situación en la que se encontraba Murray era tan grave, que incluso, en algún momento quiso suicidarse.

“Este mismo año se me llegó a pasar por la cabeza la idea de suicidarme y ese fue el instante en el que desperté y me di cuenta de que necesitaba abrirme y contárselo a la gente”, acotó Murray.

 

Luego de compartir su situación con las personas, asegura que se ha sentido mejor, situación que le ha ayudado a superar sus problemas, aspecto que lo llena de mucha felicidad.

“Estoy muy feliz de que mi testimonio haya ayudado a muchos de ustedes a encontrar la fuerza necesaria para hacerlo. Todos recibimos el cariño y la preocupación de los que nos rodean. Háblenlo”, señaló en su Twitter.


Murray aprovechó para agradecer a sus seguidores por las constantes muestras de cariño que ha recibo.


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