Por migración y violencia ha atendido Arquidiócesis de Morelia a 3 mil personas; 40 son migrantes
El arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, precisó que se brinda apoyo psicológico, espiritual, alojamiento y alimentación. Foto: Dalia Villegas Moreno.

La Iglesia en Morelia ofrece atención a migrantes y víctimas de violencia, destacando su compromiso humanitario en la región.

Ciudad de México.-La respuesta de la Iglesia católica en Morelia ante la crisis migratoria y las violencias no depende de las estadísticas, sino de la voluntad de servir a quienes se acercan en busca de ayuda, y en lo que va del año suman 3 mil personas, entre ellas, ha dado atención a 40 migrantes.

Así lo subrayó el arzobispo Carlos Garfias Merlos al explicar que el acompañamiento a migrantes y víctimas es un compromiso permanente.

“Nosotros andamos buscando a la víctima de la violencia para atenderla, ese es el punto central”.

En lo que va del año, el albergue operado por la arquidiócesis en la colonia Lago 1, en la capilla del Sagrado Corazón de la parroquia de San Juan Bosco, ha dado refugio a cerca de 40 personas, entre ellas un mexicano, ocho venezolanos, una guatemalteca, dos hondureños y una persona de Belice solo en el último mes.

Estos espacios, precisó el arzobispo, forman parte de una red nacional de más de 120 albergues que se extiende desde la frontera sur hasta la frontera norte del país.

Más allá del refugio, la atención se extiende a 12 centros de escucha ubicados en Morelia, Tarímbaro, Pátzcuaro, Quiroga, La Piedad, Ciudad Hidalgo, Acámbaro, Cuitzeo y otras comunidades.

En estos sitios se brinda atención psicológica, orientación, dirección espiritual y, cuando es necesario, entrega de despensas a familias en situación vulnerable.

El compromiso social de la Iglesia también incluye la operación de una casa del artesano en la parroquia del Divino Niño, así como un ambicioso proyecto.

La creación de un centro de desintoxicación en Morelia que atienda no sólo adicciones al alcohol y a las drogas, sino también las relacionadas con el uso excesivo de tecnologías de la información.

“Estamos buscando apoyar, recuerden, no es una responsabilidad directa de la Iglesia. La Iglesia está colaborando y aportando lo más que puede”, señaló Garfias Merlos.

La migración y la violencia han obligado a miles a buscar refugio en las parroquias y albergues.

“En nuestras parroquias tenemos muchas personas que no son de Morelia y que han llegado acá por la situación de la violencia”, advirtieron los responsables de la pastoral de movilidad humana.

En este contexto, el arzobispo destacó que lo esencial es la atención humanitaria, no la contabilización de beneficiarios.

“Lo que a mí me importa es que sepan que ofrecemos el servicio y quien lo pueda solicitar le atenderemos de la mejor forma posible”, expresó al recalcar que tan solo este año los diversos programas de la arquidiócesis han dado apoyo a unas 3 mil personas.