El Axial Seamount, un volcán submarino, podría erupcionar pronto. Aunque no amenaza a humanos, sí podría afectar la vida marina.
El Axial Seamount, un volcán submarino situado frente a las costas de Oregón en Estados Unidos, se encuentra a una profundidad de casi 1,4 kilómetros bajo el agua. Este volcán se localiza sobre un punto caliente geológico, donde potentes chorros de magma ascienden desde el manto terrestre hacia la corteza.
Este tipo de volcanes son comunes en el lecho marino, pero el Axial Seamount destaca por su ubicación en la dorsal de Juan de Fuca, una zona donde convergen las placas tectónicas del Pacífico y de Juan de Fuca. La separación constante de estas placas provoca una acumulación continua de presión bajo la superficie.
Según CNN, investigadores de la Iniciativa Regional de Observatorios Cableados de la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos, gestionada por la Universidad de Washington, han observado un aumento significativo en la frecuencia de los sismos, lo que sugiere que el volcán está acumulando magma y podría erupcionar pronto.
La última erupción del Axial Seamount ocurrió en abril de 2015, cuando se registraron alrededor de 10.000 pequeños sismos en un solo día. Anteriormente, también erupcionó en 2011 y 1998.
William Wilcock, miembro del equipo de científicos que estudia el Axial Seamount, señaló: “En este momento, hay un par de cientos de terremotos al día, pero eso aún es mucho menos de lo que vimos antes de la erupción anterior. Diría que va a hacer erupción en algún momento más tarde de este año o principios de 2026, pero podría ser mañana, porque es completamente impredecible”.
Las continuas advertencias sobre la posible erupción de este volcán han generado inquietud. Sin embargo, los investigadores aseguran que, aunque la erupción del Axial Seamount no representa un riesgo significativo para la población humana en las costas cercanas, podría amenazar la vida marina.
Según Wilcock, una erupción submarina podría alterar el ecosistema de las especies cercanas debido a la liberación de gases y materiales volcánicos que contaminarían el agua.