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Morelia, Michoacán.-Más de la mitad de los océanos del mundo no tienen dueño, lo cual permite una explotación desmesurada, que atenta contra la vida marina.

Ante esta situación, diplomáticos de las Naciones Unidas han recomendado iniciar negociaciones para crear un tratado para establecer áreas marinas protegidas, lo cual ha generado debate sobre cuánto abarcaría el resguardo de especies, pero también por el cómo se aplicarían las reglas de protección.

En este sentido el embajador de Fiji y presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Peter Thomson, dijo que en Altar mar se encuentra la mayor reserva de biodiversidad de todo el planeta, por lo que no se puede seguir sin reglar, y surge la preocupación de proteger la vida marina.

Ante la propuesta, varios países se resisten a la creación de un organismo que se encargue de regular todas estas zonas de Alta mar, ya que existen organizaciones regionales con reglas que son suficientes.

El crear estas áreas, depende de que se logre responder a las incógnitas de ¿cómo serán elegidas las áreas protegidas? ¿qué tanto de los océanos será identificado como santuario? ¿se prohibirá toda la extracción de recursos marinos en esas reservas o se permitirá algo de actividad humana? ¿cómo será vigilada la aplicación de las protecciones?.

Las negociaciones por este tratado se prevé inicien en el 2018.

Las discusiones sobre las áreas protegidas también podrían significar una manera de resguardar las zonas contra los efectos más nocivos del cambio climático. Es cada más latente la evidencia de que establecer santuarios amplios, pueden ser favorables para los ecosistemas marinos y las poblaciones costeras.

También el crear áreas protegidas permitirían que las especies vulnerables puedan procrear y migrar a otras zonas, incluidas donde es permitido la pesca.

En relación a esto, Cal Gustaf Lunidn, director del programa global marino de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, expresó que la iniciativa no sería un riesgo para la actividad económica de la pesca, sino sería un apoyo, para restaurar los conjuntos cada vez menores de peces, “ya agotamos la mayoría de las presas”.

En la espera de que se apruebe el tratado, de momento varios países han designado zona de reserva, como la del mar de Ross o Marea Moana cerca de las islas Cook en el Pacífico, esta última la más reciente.