Hierven las aguas guindas
Las aguas guindas están que hierven, y es que los jaloneos al interior de Morena están a la orden del día en pos de las candidaturas.
Para muestra un botón. En fechas recientes como enviado de la coordinadora nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta transformación, pisó tierras michoacanas el senador César Cravioto, buscando concretar una reunión de primer nivel.
Pero más tardó en llegar a Michoacán que en ser bateado, por lo que su reunión de altos vuelos quedó sólo en sueño y tuvo que retornar a la Ciudad de México con las manos vacías.
Ante el desaire, Claudia Sheinbaum mandó nuevo emisario, en esta ocasión a Diego Hernández –exescolta del líder de líderes de Morena-, ya no para una reunión de primer nivel, sino para un encuentro con el dirigente estatal de ese partido.
El mensaje cayó como bomba en el ánimo local, pues se notificó que todas las candidaturas federales serán definidas en la Mesa Nacional y que no habrá injerencia del Consejo Estatal.
Tras la respectiva mentada de madre a Hernández, se le habría sugerido salir de Michoacán, recordándole los peligros que se pueden correr al transitar por el estado.
El escándalo Inverforx
Burócratas y políticos en Michoacán llevan meses mordiéndose las uñas y con las veladoras encendidas, rezándole a sus santos más queridos porque el escándalo del Grupo Inverforx no los alcance.
Y es que fueron muchos a los que la avaricia les ganó e invirtieron sus ahorritos en la empresa de inversión que, a modo de pirámide, habría embaucado a miles con significativos rendimientos en sus ahorros.
El caso recuerda a muchos el “fabianazo” operado en Michoacán por Mauricio Dromundo Fernández en la década de los ochenta. Hoy como entonces, hay quien sigue suspirando porque les será pagado su dinero.
No son pocos los que están temblando frente a lo que ya se devela como un fraude, y entre ellos hay muchos de la clase política michoacana que se habrían visto afectados.
Diputadas, magistrados, líderes de partido y hasta el Fiscal del Estado, serían víctimas de lo que creían una ventajosa inversión para sus finanzas personales.
Pero la lista abarca a muchos más, de altos y medios vuelos, muchos de ellos exfuncionarios del silvanismo que hoy, además de estar lejanos del erario público de pilón se habrán quedado en banca rota.
El asunto está reventando y el manejo político en medio del proceso electoral está en ciernes. Por lo pronto hoy, quienes acudieron a las afueras de la Fiscalía del Estado, sólo fueron a dar rueda de prensa ya que ni denuncia presentaron con la esperanza aún, de poder recuperar su dinerito.
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A las caiditas
Entre la chiquillada local hay que está a las caiditas, y es que los partidos políticos estatales de reciente creación no pueden coaligarse o compartir candidatos con otros partidos en su primera elección, por lo que algunos están a la espera de poder capitalizar las aspiraciones de quienes no puedan contender con los de siempre.
Uno de ellos es Michoacán Primero, de Antonio Plaza Urbina que ya le guiña el ojo a Alfonso Martínez Alcázar en caso de que el edil no pueda concretar su candidatura con el Frente tripartita de PRI, PAN y PRD debido a que dichos partidos no paran de pelearse.
Alfonso tiene pues, varias cartas bajo la manga aún para jugar en pos de la reelección por Morelia.