En CDMX el PRI busca castigar con hasta 6 años de prisión los ataques con jeringas
Se daría mayor castigo si las víctimas son miembros de grupos vulnerables. Foto: Congreso de la Ciudad de México

El PRI en CDMX propone sancionar los ataques con jeringas con hasta 6 años de prisión, enfocándose en proteger a grupos vulnerables.

Ciudad de México.-En la Ciudad de México, el grupo parlamentario del PRI ha propuesto una reforma al Código Penal para tipificar como delito la agresión mediante pinchazos con jeringas.

Esta iniciativa busca que el delito sea perseguido de oficio, con penas de cinco a seis años de prisión, especialmente si las víctimas son miembros de grupos vulnerables como menores, mujeres y personas mayores.

La diputada Tania Larios explicó que el objetivo de esta propuesta es establecer un tipo penal que desincentive estas conductas, en respuesta a más de 40 denuncias registradas en la capital en los últimos meses. Además, señaló que este tipo de agresiones ya se han reportado en otros estados como México y Nuevo León, y que tienen antecedentes en Europa, en países como Reino Unido, Francia, Alemania, Países Bajos, España y Bélgica. En estos lugares, se han implementado protocolos de prevención y respuesta debido a la gravedad de los casos.

En el Reino Unido, por ejemplo, el fenómeno conocido como “needle spiking” registró mil 200 casos en un periodo de cinco meses, lo que llevó al parlamento británico a considerar la creación de una nueva figura penal.

La iniciativa presentada añade un capítulo al título tercero del Código Penal, relacionado con los delitos de peligro para la vida o la salud. Se define que “comete el delito de sumisión química por pinchazo quien introduzca, sin consentimiento, un instrumento con punta aguzada en un tejido, órgano o cavidad del cuerpo humano con la intención de drogar, debilitar y facilitar la comisión de otros delitos”.

La propuesta incluye agravantes que aumentan la pena si las víctimas pertenecen a grupos vulnerables, si el delito se comete en un vehículo particular o transporte público, si hay más de un agresor, si ocurre en un lugar solitario o de acceso restringido, o si hay antecedentes de amenazas.