Congreso de Michoacán listo para toma de protesta de Bedolla; presidenta del Legislativo local asegura que tema político quedará de lado
Morelia, Michoacán.- El equipo de protocolo del gobernador electo, Alfredo Ramírez Bedolla, ya tuvo acercamiento con el Congreso de Michoacán, para ultimar los detalles de la toma de protesta como jefe del Poder Ejecutivo en la entidad.
Lo anterior lo confirmó la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Adriana Hernández Íñiguez, quien recordó que el Poder Legislativo debe estar listo para cualquier escenario que se presente, en tanto la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, emite un fallo definitivo.
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“El Congreso va por un proceso institucional, todavía no hemos tenido nada formal pero debemos seguir con el proceso independientemente del resultado. Ya hay acercamientos con el equipo de protocolo de Alfredo y estamos preparados para todos los escenarios, nuestro papel es representar a los michoacanos y el tema político queda en otro lado”.
Adriana Hernández Íñiguez, Presidenta de la Mesa Directiva del Congreso del Estado
Para contexto de nuestros lectores la elección a gobernador de Michoacán todavía está impugnada y resta que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, emita un fallo definitivo al respecto de si se anula o se ratifica como gobernador electo a Alfredo Ramírez Bedolla.
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Se estima que la sesión pública en la que la Sala Superior emita la resolución definitiva, sea el próximo martes. Aunque tienen como plazo hasta el próximo jueves 30 de septiembre para analizar el caso de Michoacán. De no ratificarse el triunfo de Ramírez Bedolla, no habrá toma de protesta y se tendrá que hacer cargo un gobernador interino por un máximo de 15 días en tanto el Congreso nombra a un gobernador que esté al frente de la entidad hasta que se realicen nuevas elecciones.
Importante es recordar que fue la alianza PAN-PRI-PRD que conforman el Equipo por Michoacán, la que impugnó la elección a través del que llaman “juicio madre”, en el que enlistan varios puntos que aseguran son elementos suficientes para “tumbar” la elección. Entre estos, están la supuesta injerencia del crimen organizado en el proceso electoral, la diferencia entre votos nulos y el primer y segundo lugar, las intervenciones del presidente de México y otros.