A consecuencia de la reingeniería que se aplicó en el Ayuntamiento que dirige Alfonso Martínez Alcázar, hasta el momento se han aplicado siete modificaciones sobre el Bando Municipal en respuesta a las deficiencias administrativas que se generaron a partir de las transformaciones operativas que sufrió el gobierno capitalino.
Fue Jorge Molina Bazán, líder del Sindicato de Empleados Municipales, Administrativos y Conexos de Morelia (SEMAMC), quien, una vez más, insistió en las problemáticas que se generaron en el Ayuntamiento a partir de la reingeniería administrativa que solicitó el presidente independiente, Alfonso Martínez Alcázar.
“En un año lleva siete modificaciones el Bando Municipal, y eso únicamente refleja que la llamada reingeniería administrativa no es operativa, no funciona”, dijo.
Tal y como lo ha venido señalando, Molina Bazán subrayó que con la transformación administrativa que sufrió el Ayuntamiento, el gobierno independiente cedió cerca de 300 plazas laborales a personal que, dijo, no responde a las necesidades y exigencias de la ciudadanía capitalina.
En entrevista, el líder sindical lamentó que exista una mala distribución de personal en las áreas operativas del Ayuntamiento, al señalar que mientras en Tesorería se tienen un total de 520 trabajadores, otras áreas como Parques y Jardines en donde, dijo, existe un importante déficit operativo, tan sólo existen 360 empleados.
“Es incongruente que tengamos saturadas áreas como Tesorería y la Secretaría de Administración, cuando en otras áreas que realmente se requieren más trabajadores existan déficits operativos que limitan la respuesta del Ayuntamiento ante las exigencias de los morelianos”, agregó.
Además, condenó que el gobierno de Martínez Alcázar habría “abusado” en la entrega de gratificaciones y salarios elevados, para aquellos trabajadores que arribaron a la administración municipal con el cambio de gobierno. “Uno no está en desacuerdo de que ganen bien quienes desempeñan funciones importantes, pero realmente no trabajan y ahí está el problema”, agregó.
Continúan negociaciones sobre contrato colectivo
Ante este escenario, Molina Bazán recordó que actualmente el Sindicato de Empleados Municipales, Administrativos y Conexos de Morelia está llevando a cabo reuniones con el Ayuntamiento para dar seguimiento a la revisión bianual del contrato colectivo, en donde, dijo, “no han existido avances importantes”.
Dijo que la razón principal de someter a revisión el contrato colectivo, aterriza en reevaluar el funcionamiento que se tiene en el Ayuntamiento, pues dijo que además de las irregularidades ya señaladas, actualmente el gremio a su cargo está exigiendo una respuesta por 39 violaciones contractuales identificadas.
Entre estas violaciones, dijo que destacan temas relacionados con una “holgada disciplina” en la administración municipal, pues refirió que los trabajadores del Ayuntamiento están omitiendo confirmar asistencias para justificar sus salarios.
Aunado a ello, destacó que el sindicato a su cargo también está buscando que se aplique un incremento salarial del 25 por ciento a partir de la revisión bianual del contrato colectivo, ante lo cual, subrayó, “las negociaciones están algo trabadas”.
“Espero que le aprieten un poquito más, porque van muy lentos”, aseveró Jorge Molina al momento de señalar que también se buscarán elevar prestaciones como apoyos económicos en becas estudiantiles y el fondo de ahorros que se le otorga a los trabajadores del municipio.
Bajo este tenor, el SEMAMC continúa negociando con el Ayuntamiento para conseguir que se modifique el contrato colectivo con dicho gremio, ya que de no ser así, a partir del próximo 16 de noviembre está corriente sindical hará efectivo el emplazamiento a huelga que ya se ha venido anunciando.
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