El regidor Benjamín Farfán denunció que la corrupción y los intereses oscuros han impedido que el Ayuntamiento de Morelia regule bares y antros con exceso de ruido y horarios fuera de la norma
El regidor Benjamín Farfán acusa corrupción y falta de voluntad política en el Ayuntamiento de Morelia, para aplicar el reglamento municipal en los Bares y Antros del municipio. / Foto: Raúl Tinoco / Contramuro

El regidor Benjamín Farfán denunció que la corrupción y los intereses oscuros han impedido que el Ayuntamiento de Morelia regule bares y antros con exceso de ruido y horarios fuera de la norma

Morelia, Michoacán.- La falta de regulación de los bares en Morelia y otros centros nocturnos responde a la corrupción y a los “intereses oscuros” que operan dentro del Ayuntamiento, acusó el regidor del PAN, Benjamín Farfán Reyes.

Durante una sesión de cabildo, el funcionario presentó un punto de acuerdo para regular la operatividad de los llamados giros rojos. Señaló que, “por miedo”, las autoridades municipales habrían evitado sancionar a los antros y bares que incumplen con el reglamento municipal.

De acuerdo con ciudadanos, los principales reclamos provienen de zonas como Avenida Enrique Ramírez, el Centro Histórico y el Boulevard García de León, donde los vecinos padecen exceso de ruido y horarios extendidos.

El Reglamento de Establecimientos Mercantiles establece que el nivel de ruido no debe superar los 68 decibeles de día y los 66 por la noche, además de fijar el cierre entre las 2 y 3 de la madrugada. Sin embargo, la norma ha quedado en letra muerta.

Farfán Reyes denunció que varios antros en Morelia, como Sense o Pecatto, suelen cerrar hasta después de las 4 de la mañana. Aunque en ocasiones son clausurados, reabren a los pocos días tras pagar multas elevadas.

“Hay personas intocables porque tienen relación directa con algunos funcionarios municipales. Es una mezcla de intereses económicos, corrupción y falta de voluntad política”, señaló el regidor.

Actualmente, el municipio cuenta con alrededor de 5,100 licencias tipo C para venta de alcohol, mientras apenas 60 inspectores vigilan su cumplimiento. Ante ello, el alcalde Alfonso Martínez planteó la creación de una comisión de regidores que atienda la problemática, que aseguró fue heredada por administraciones anteriores.