Morelia, Michoacán.- Luego de que la diputada local panista Andrea Villanueva Cano, presentara ante el pleno del Congreso del Estado una serie de reformas a la legislación local para reconocer los derechos de los infantes que viven en las cárceles de la entidad, las internas que viven con sus hijos en el Centro de Reinserción Social “David Franco Rodríguez”, aseguran que la legisladora las “engañó” al prometerles mejores condiciones de vida para sus hijos, lo cual a decir de ellas, fue falso.
Y es que entre las reformas que Villanueva Cano presentó, está la que reduce el tiempo que los niños pueden vivir con sus mamás dentro del penal, pues la ley dictaminaba cuatro años y en la que presenta la diputada son únicamente tres. Situación que no gustó a las internas pues además señalan que una vez que los niños deban irse, se deberá hacer un estudio socioeconómico a sus familias para saber si son aptas para cuidar a los pequeños y de no ser así, serían entregados al DIF.
“La molestia que tenemos nosotras es que ella vino a vernos, nos dijo que iba a presentar una ley para que nuestros hijos vivieran mejor aquí adentro, pero no. Vino gente con ella y descompusieron la realidad, dijeron en sus notas que nuestros niños dormían en camas de piedra, pero nunca aclararon que esas camas de piedra tienen colchones, que la estancia estaba en malas condiciones y es incorrecto. Tiene todo lo que se requiere para que estudien y pasen tiempo de calidad aquí”, argumentaron las reclusas.
Ellas, también temen que una vez que se cumpla la temporalidad en la que se les permite vivir con sus hijos, se los lleven y los alejen de su familia. “Es que viene siendo lo mismo. Mis papás son de bajos recursos, pero con esfuerzo me han dicho que se harán cargo de mi hijo. Si les hacen ese estudio que dice la diputada no se los van a entregar y lo van a llevar al DIF y viene siendo lo mismo, es también una cárcel y además ahí estará con gente extraña, eso es contradictorio, que mejor cuidado pueden tener nuestros hijos que con nuestra familia”.
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Las madres del Mil Cumbres reviran la versión de Villanueva Cano de que los niños deben ser llevados a las visitas conyugales, que las camas tienen cucarachas, que los cuartos tienen goteras y que son maltratados por otras internas e incluso por ellas. Refieren que son niños que pueden salir del penal cuantas veces quieran y por el tiempo que así lo deseen, reiteran que tienen nombre y familia, que son niños que se desarrollan en condiciones distintas al resto, pero como pocos, con la atención plena de ellas.
“Ella dice que nuestros niños son invisibles y no es así, nuestros hijos no son invisibles. Ellos tienen nombre, tienen derechos y se les respetan, tienen familia y aquí adentro tienen lo necesario para vivir. Juegan, aprenden, tienen atención médica si se llegaran a enfermar y nos tienen a nosotras de tiempo completo. Son niños que cuando salgan de aquí merecen estar con nuestra familia y no ser entregados a extraños, en donde no sabemos qué cuidados les podrán dar”, matizan.
La también llamada Ley para “Niños Invisibles”, fue aprobada en el pasado mes de marzo y entró en vigor, por lo que ahora a pesar del descontento de las madres se tendrán que apegar a ella. Aunque algunas, advirtieron que buscarán que se les respete la Ley anterior con la cual fueron ingresadas al Cereso. Si bien la mayoría de ellas no tiene sentencia todavía y no saben cuándo se podrá dictar su resolución, pide poder mantener a sus hijos a su lado el mayor tiempo posible.