Desplazamiento por violencia en Apatzingán suma más de 207 personas
Imagen Ilustrativa de desplazados / Foto: Victor Moriyama / ACNUR

El desplazamiento por violencia en Apatzingán afecta a más de 207 personas, según la regidora Carmen Zepeda Ontiveros.

Apatzingán, Michoacán.- La regidora de Apatzingán, Carmen Zepeda Ontiveros, alertó sobre la crisis humanitaria por el desplazamiento forzado de familias enteras en la región, derivado de la violencia y el control del crimen organizado.

“Aquí en tu casa tenemos un albergue para desplazados, pero ya no lo podemos sostener, la verdad”, declaró la regidora en entrevista, al referirse a la incapacidad institucional y comunitaria para atender la emergencia.

Según la regidora, el fenómeno alcanza a más de 200 personas con registro directo, aunque la cifra real sería mayor debido a que muchas familias han buscado refugio en municipios vecinos.

“Le estamos dando seguimiento a unos refugiados que están en Tumbiscatío, a otros que están en Tancítaro y a los que están acá en esta ciudad, y bueno, le estamos dando seguimiento a 207”, detalló.

Reveló que las comunidades más afectadas por el desplazamiento son El Manso, El Mirador, El Morado, El Mezquital, Holanda, La Loma de los Hoyos, La Puerta de Alambre, El Alcalde y El Guayabo, además de Acatlán y San José de Chila, donde prácticamente ya no queda población.

“Allá arriba en Acatlán no hay nadie, y en San José de Chila quedan dos, tres gentes. Está complicado, está muy complicado el asunto de los desplazados, muy, muy complicado”, lamentó.

La regidora vinculó directamente esta crisis con el apoderamiento del crimen organizado sobre los gobiernos municipales.

“Eso es sabido, es un secreto a voces, que todos los alcaldes por acá obedecen al crimen organizado. Pero igual no se puede ser esclavo para siempre”, señaló.

Criticó que los gobiernos prioricen intereses políticos por encima de atender la emergencia humanitaria.

“Lo más complicado es que nos quedamos callados. El miedo acá ha ejercido tal poder entre la gente que nadie quiere hablar, y andan más ocupados en ver cómo se encaraman en los espacios de poder, en el 27, que en resolver los problemas que tiene la gente”, reprochó.

La regidora concluyó que la situación en Apatzingán y comunidades aledañas requiere atención urgente del estado y de la federación, al ser un problema que desborda las capacidades locales.