“El R1”, el operador silencioso del CJNG
Ramón Ángel Álvarez Ayala, “El R1”, Jefe Regional del CJNG en Michoacán / Foto: Cortesía

El “R1”, operador del CJNG, ha reconstruido su imperio criminal en Michoacán, consolidándose como una figura clave en el narcotráfico regional.

Morelia, Michoacán.- Por más de dos décadas, el nombre de Ramón Ángel Álvarez Ayala, identificado bajo el alias de “El R1”, aparece en los expedientes de inteligencia como uno de los hombres clave del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), debido a su cercanía al líder del grupo criminal, Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”.

Aunque en estos momentos su nombre se ha mediatizado luego de que el secetario de Seguridad Publica y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, lo señala de dar la orden de asesinar al alcalde de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, su figura se remonta al extinto Cártel del Milenio, desde donde escaló de ser uno de los mandos medios a la primera línea del CJNG.

Tras la detención de Jorge Armando “N”, “El Licenciado”, presunto autor intelectual del asesinato del alcalde de Uruapan, la investigación apunta hacia arriba en la cadena de mando y pone nuevamente bajo la lupa al jefe regional más influyente del CJNG en Michoacán.

“El R1”, el operador silencioso del CJNG que reconstruyó un imperio criminal en Michoacán
Integrantes del CJNG en Michoacán / Foto: Captura de pantalla

El ascenso desde el Cártel del Milenio

Reportes de inteligencia señalan que “El R1” inició su carrera criminal a principios de los años 2000, en el Cártel del Milenio, donde “empezó desde abajo”. Fue en esa etapa cuando conoció a Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, de quien se ganó su confianza hasta convertirse en uno de sus operadores más cercanos. Tras la caída de aquella organización, ambos migraron al recién formado CJNG.

Sin embargo, su carrera criminal se vio interrumpida en septiembre de 2012, cuando un operativo federal en la colonia Providencia, en Guadalajara, lo detuvo junto con dos de sus hermanos: Rafael, “El R2” y Jesús Santiago Álvarez Ayala. Los tres fueron aprehendidos con armas largas y cortas, cargadores, cartuchos y equipo de comunicación.

Para ese entonces, las autoridades ya lo consideraban el segundo hombre más importante del CJNG.

El R1 fue sentenciado en 2016 a 20 años de prisión por delincuencia organizada, pero su historia dio un giro en 2022, luego de una serie de impugnaciones, a través de las cuales, la jueza federal, Yolanda Chávez Montelongo, lo absolvió y ordenó su liberación el 19 de noviembre.

El clan Álvarez Ayala; una franquicia criminal familiar

El poder de Ramón Álvarez Ayala no se explica sin su estructura familiar, pues no sólo se identifica a “El R1” como operador del CJNG en Michoacán, sino también aparecen la lista su hermano Rafael, “El R2”, señalado como jefe operativo y encargado de la logística; Jesús Santiago, escolta de sus hermanos y Roldán Álvarez Ayala, exalcalde de Apatzingán y hermano político, con señalamientos por extorsión y detenido en el “Michoacanazo”.

De acuerdo con documentos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) y la Fiscalía General de la República (FGR), desde 2012, esta familia fue identificada como responsable de coordinar narcobloqueos, expandir el dominio territorial del CJNG y desatar violencia en Jalisco, Guanajuato y Michoacán.

En el organigrama criminal, Ramón y Rafael son las piezas centrales, ya que, mientras “El R1” dirige la expansión y el control territorial, “El R2” mantiene los enlaces operativos.

“El R1”, el operador silencioso del CJNG que reconstruyó un imperio criminal
Jorge Armando N., “El Licenciado”, integrante de una célula afín al CJNG y uno de los autores intelectuales del asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo / Foto: Cortesía

“Los Cannabis”, la célula operadora del CJNG en Uruapan

Tras su liberación en 2022, “El R1” retomó las operaciones del CJNG en Tierra Caliente y en la zona aguacatera de Uruapan, y a partir de ello, creó la célula conocida como “Los Cannabis”, brazo armado encargado del trasiego de drogas y las extorsiones a productores y empresarios.

Según los reportes de las autoridades federales, “Los Cannabis” se convirtieron en el principal objetivo del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo.

El quiebre llegó dos meses antes de su asesinato, cuando la policía municipal detuvo, sin disparos, a René Belmonte Aguilar, “El Rhino”, jefe de plaza y miembro de la célula, y que Carlos Manzo mostró la captura en una transmisión en vivo desde sus redes sociales personales, lo que generó la furia del grupo.

La noche del 1 de noviembre, durante las celebraciones del encendido e Velas en la Plaza Morelos de Uruapan, previo a la Noche de Muertos, el edil fue asesinado por Victor Manuel N.

Tras anunciarse ayer la captura de Jorge Armando N., “El Licenciado” se reactivó la línea que apunta directamente a El R1 como el mando el mando que pidió el homicidio del alcalde.

De acuerdo con información revelada por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, el jefe de la célula en Uruapan habría confesado que su líder inmediato era Ramón Álvarez Ayala.

La Fiscalía General del Estado (FGE) documentó cómo, a través de un chat cifrado, se ordenó vigilar al alcalde, rastrear sus movimientos y ejecutar el ataque incluso si iba acompañado.

Poder criminal y conexiones políticas

Los informes de inteligencia señalan que “El R1” mantiene un frente político a través de su hermano Roldán, quien ha ocupado cargos municipales y estatales en Michoacán, y que llegó a aparecer en listas de candidatos plurinominales por Morena en 2018 y 2024.

Roldán Álvarez Ayala ha sido señalado por extorsión y formó parte del grupo de funcionarios detenidos en el Michoacanazo.

Sin embargo, Ramón Ángel Álvarez Ayala, “El R1”, se mantiene como la figura central y se le identifica como jefe regional del CJNG; líder de “Los Cannabis” y cabecilla del clan Álvarez Ayala, grupo que mantiene la operatividad delincuencial también gracias a sus vínculos políticos en Michoacán.