En Michoacán, más de 697 mil mujeres rurales sostienen la comunidad y la agricultura
Imagen Ilustrativa / Foto: Cambio de Michoacán

Las mujeres rurales en Michoacán sostienen la comunidad y agricultura, enfrentando desigualdades educativas y económicas persistentes.

Morelia, Michoacán.- En Michoacán, más de 697 mil 586 mujeres rurales sostienen la vida comunitaria y agrícola de la entidad, pero sus condiciones de participación económica y educativa reflejan una desigualdad estructural que persiste desde hace décadas.

De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2020 del INEGI, las mujeres representan el 13.3 por ciento de la mano de obra en el campo, de un total de 1 millón 328 mil 101 personas dedicadas a actividades agropecuarias.

Este porcentaje, lejos de avanzar, muestra un retroceso respecto al 17.1 por ciento registrado en 2007, lo que evidencia la pérdida de presencia femenina en un sector históricamente marcado por la precarización y la falta de reconocimiento.

El trabajo de las mujeres rurales, muchas veces no remunerado y ligado al autoconsumo o a la producción familiar, continúa sin valorarse en los sistemas productivos formales.

La brecha educativa profundiza esta desigualdad: datos del INEGI muestran que en Michoacán 52 mil 97 personas carecen de escolaridad, mientras que 381 mil 605 sólo alcanzaron algún nivel de educación básica, principalmente primaria o secundaria.

El acceso a niveles medios o superiores sigue siendo limitado, ya que apenas 71 mil 284 personas cursaron educación media superior, cifra que ilustra la desigual distribución de oportunidades educativas en las zonas rurales, donde las mujeres enfrentan obstáculos adicionales como la falta de infraestructura escolar, los matrimonios tempranos y la carga doméstica.

A esto se suma la diversidad cultural del estado, pues entre las mujeres rurales mayores de 12 años, 18 mil 710 hablan alguna lengua indígena, y 461 se reconocen como afrodescendientes o afromexicanas.

Sin embargo, esta pluralidad no se traduce en políticas públicas que atiendan sus necesidades específicas o promuevan su autonomía.

En el marco del Día Internacional de las Mujeres Rurales, que se conmemora cada 15 de octubre, los datos del INEGI evidencian que el reconocimiento simbólico no basta.

Las cifras retratan una deuda histórica con las mujeres que trabajan la tierra, preservan la cultura y sostienen la alimentación, pero siguen siendo las más olvidadas en materia de educación, derechos laborales y representación social.