Foto: Ismael Díaz

La destitución inmediata de la directora del Hospital Psiquiátrico de Morelia, Eugenia Silva Aguilar, exigen los trabajadores de esa institución. La acusan de nepotismo por tener a su esposo, Jorge Alejandro Aquino, como su asistente y de encabezar una escalada reiterada de acoso laboral contra la plantilla de empleados tanto de base como de contrato.

El hostigamiento, acoso laboral y violación reiterada al contrato colectivo de trabajo son el motivo por el cual casi la mitad de los trabajadores, de un total de 80, han decidido denunciar públicamente el daño del que son objeto, “es una violación constante”, esgrime el abogado de los afectados, Francisco Matías.

“La Comisión Estatal de Derechos Humanos, ha sido omisa”, es decir no ha hecho nada en favor de resarcir las violaciones a los derechos fundamentales de los trabajadores, con todo y que ya se interpusieron dos quejas en esa instancia, la cuales ni siquiera han llegado a la etapa de conciliación, dice Matias.

Ya fue informada la Secretaría de Salud, de los excesos y abusos de esta funcionaria y su séquito de allegados. Cinco de los siete sindicatos que hay en en sector salud se han encargado de ello, aunque hasta el momento la respuesta ha sido el silencio por parte de la dependencia encargada, relata el representante jurídico, quien hasta dice que los excesos de la autoridad han llegado a las agresiones físicas.

Es injusto, que tomes tus periodos vacacionales y cuando llegues tus mismos pacientes te digan que la dirección general te acusa que abandonaste el trabajo, eso pone en duda tu ética profesional y afecta toda una vida de trabajo tanto en el servicio público como en privado. Eso es acoso laboral relata el doctor Jaime Monterde, quien lleva 15 años trabajando en el hospital.

Dice que el diálogo para este problema, tratar de conciliar, ya no está a discusión, pues las autoridades encargadas del sector salud ya fueron enteradas desde hace mucho tiempo de los excesos y abusos y no han hecho nada, la solución remata es la salida inmediata de la directora y sus compinches.

En estricto sentido son siete casos que han escalado a la vía legal y son en promedio cuarenta trabajadores inconformes con lo que adentro pasa, asegura Monterde, quien coincide con el abogado al denunciar que el esposo de la directora es asistente de la misma.

Mientras tanto, en la indefensión ante los abusos de la autoridad están los trabajadores, quedaron a la espera y esperanzados en que al fin las autoridades de la Secretaría de Salud pongan orden en esta parte del gran caos que es el sector salud de Michoacán.


Para más noticias dale Me Gusta a nuestra página