Fernández Noroña rechaza renunciar a la presidencia de la mesa directiva en el Senado pese a las críticas de activistas y oposición, reafirmando su liderazgo hasta agosto
Desde la tribuna de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, Gerardo Fernández Noroña, miembro del partido Morena, declaró que no renunciará a su cargo como presidente del Senado, a pesar de las solicitudes de organizaciones y legisladores de oposición. Estas peticiones surgieron debido a sus comentarios sobre las víctimas de delitos en México y sus críticas al gobierno de Estados Unidos.
“Seré su presidente de la Permanente y de la Cámara de Senadores hasta el 31 de agosto de este año, les pese lo que les pese, y les duela lo que les duela”, afirmó Fernández Noroña.
El martes, familiares de personas desaparecidas, a través de un comunicado, pidieron la renuncia de Fernández Noroña, acusándolo de mostrar “desprecio hacia el dolor ajeno” y de revictimizar a más de 128 mil personas desaparecidas y comunidades migrantes.
Activistas expresaron en una carta dirigida a la presidenta Claudia Sheinbaum que “sus constantes declaraciones, cargadas de insensibilidad y arrogancia, han herido profundamente a las víctimas de la violencia en México”.
La senadora panista Lilly Téllez instó a la presidenta Claudia Sheinbaum a promover la renuncia del presidente del Senado debido a su enfrentamiento con el gobierno de Estados Unidos y el senador estadounidense Eric Schmitt, relacionado con el impuesto a las remesas de migrantes.
“Es urgente que el presidente de la mesa directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, sea removido de ese cargo porque está dañando a los migrantes mexicanos en Estados Unidos, y está dañando la relación entre Estados Unidos y México, y la está dañando con sus declaraciones, porque desgraciadamente Fernández Noroña parece un perro sin bozal que muerde a los de casa”, sentenció.