Bajo la bandera de la “no represión” y el “a mi no me toca”, la federación el estado y los municipios fueron omisos en bloqueos férreos reportados en Michoacán
Morelia, Michoacán.- Bajo la bandera de la “no represión” y el “a mi no me toca”, los gobiernos federal, estatal y municipales de Uruapan, Morelia y Pátzcuaro, han sido omisos ante las protestas del magisterio disidente en Michoacán, sobretodo con los temas de los bloqueos férreos y cierre de vialidades.
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Y es que las prácticas de maestros y egresados normalistas, no solamente entorpecen el tránsito -en este caso de morelianos- y de la industria en la entidad, sino que también genera una mala imagen para los inversionistas extranjeros y por los bloqueos férreos, pérdidas económicas.
A decir del presidente de la Asociación de Industriales del Estado de Michoacán A.C. (AIEMAC), Carlos Alberto Enríquez Barajas, las pérdidas para el sector industrial superaron los 4 mil millones de pesos en los poco más de 100 días que duró el bloqueo a las vías del tren. Mientras que la empresa Kansas City, perdió hasta 25 millones de dólares en la bolsa.
Para el líder de los industriales en la entidad, los bloqueos en las vías del tren en los municipios de Pátzcuaro y Morelia, especialmente en la comunidad de Caltzontzin en Uruapan, fueron incluso más perjudiciales que la pandemia de Covid-19, durante su punto más álgido. Y es que al menos una empresa que ya estaba instalada en la entidad, abandonó la inversión en Michoacán para trasladarse a otro estado.
“En mi percepción creo que a la industria nos impactó muchísimo más el tema social (bloqueo de trenes) que la pandemia (…) sabemos que hay grupos que siguen con estas prácticas que afectan la percepción de lo que sucede en Michoacán, y normalizan que nos vean como un Estado donde no puedes desarrollar tus actividades y eso nos preocupa”.
Carlos Alberto Enríquez Barajas, Presidente de la Asociación de Industriales del Estado de Michoacán
Y es que a pesar de señalar que Michoacán es por naturaleza “atractivo” para la inversión al estar cerca del centro del país y contar con uno de los puertos más grandes y viables de México, la mala imagen que ha dejado el magisterio disidente da una percepción equivocada de lo que realmente sucede en la entidad. “El volver a hacer esta imagen positiva de nuestro Estado y que vuelvan a confiar en nosotros tardará mucho”.
Hay que recordar que cuando inició el bloqueo de las vías férreas en julio pasado, la entonces titular de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, declaró durante una rueda de prensa “mañanera” a pregunta expresa de lo sucedido en la entidad, que por parte del gobierno federal no habría represión, sino diálogo con los docentes; sin embargo el diálogo no logró que “soltaran” las vías.
En tanto, la administración estatal de Silvano Aureoles Conejo, se “lavó las manos” al señalar que las vías del tren son del ámbito federal y que entonces, no le competía al Estado usar la fuerza pública para desalojar a los docentes. “Es un tema que no le toca al Estado, pero estamos listos para apoyar a la federación en cuanto nos digan qué hacer”, declaró entonces el ex gobernador.
Una vez iniciada la gestión de Alfredo Ramírez Bedolla, tampoco se hizo mayor cosa para dejar al libre paso las vías del tren; más allá de un intento de “promesa” de pago que incluso se hizo antes de rendir protesta; sin embargo, en ese momento no hubo el recurso prometido y los docentes se quedaron en las vías. Fue hasta semanas después y ya con adelantos de participaciones y la contratación de un crédito, que se pudieron pagar las quincenas adeudadas y hasta entonces se liberaron las vías.
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