Este miércoles la Sesión Solemne del Congreso para conmemorar la Constitución de Apatzingán, quedó marcada por el homicidio de Bernardo Bravo
Morelia, Michoacán.- El homicidio del líder limonero Bernardo Bravo, marcó la sesión solemne del Congreso del Estado realizada en Apatzingán, para conmemorar el CCXI Aniversario de la Constitución de 1817.
Con la protesta manifiesta de diputados por la realización de la sesión pese a la crisis de inseguridad por la que atraviesa el municipio, en medio de un fuerte operativo de seguridad que impidió el acceso de la población al evento y por momentos a algunos legisladores, la Sesión se realizó con la presencia de los titulares del Poder Ejecutivo y del Judicial.

Las pancartas que portaban los legisladores consignaban entre otras ideas: “Menos (-) #Jalofest (+) seguridad”, “Apatzingán con Berna”, “Justicia para Apatzingán”, y encontraron su acento mayor cuando tras hacer uso de la palabra la diputada Sandra Garibay Esquivel para condenar el homicidio del líder molinero, abandonó la sesión junto con un grupo de legisladores.
Sandra Garibay, de Morena, y diputada por el distrito de Apatzingán abandonaría la sesión en compañía de su compañera de bancada Itze Camacho Zapiaín, del perista Hugo Rangel, del priista Guillermo Valencia, del independiente Carlos Tafolla, de la panista Vanessa Caratachea y de la integrante de la Representación Parlamentaria, Belinda Hurtado Marín.
Luego de ser entonado el himno nacional, desde su asiento Garibay hizo uso de la palabra para referir:
“Hoy conmemoramos a quienes lucharon por nuestras libertades y lo hacemos con gratitud, sin embargo, también reconocemos que esas libertades enfrentan nuevos desafíos, nos duele la pérdida de mujeres y hombres valientes de este valle, del Valle de Apatzingán, tierra que alguna vez inspiró a grandes insurgentes y que hoy sigue siendo símbolo de fuerza y resistencia”.
Calificó como triste ver cómo muchos “caen sin encontrar justicia, pero su memoria debe impulsarnos a no rendirnos, a seguir construyendo el futuro que ellos soñaron. La Constitución de Apatzingán promulgada el 22 de octubre de 1814, fue el primer intento de dar forma a un gobierno republicano y justo”

La legisladora recalcó que hoy más que nunca, Apatzingán está de pie “con esperanza y con la fuerza de su gente. Lamento que usen la fuerza pública para impedir el acceso a los apatzinguenses a esta Sesión Solemne y no la utilicen para encontrar la justicia por un hombre que dio su vida por nuestra región”.
También el galardonado con la Presea Constitución de 1817, Orlando Aragón, aludió al asesinato de Bernardo Bravo, sumándose a la exigencia de justicia “para un luchador social, que yo no tuve la fortuna de conocer, pero que es indudable por conocidos en común y por la lucha que sostuvo, que merece como todos justicia y un esclarecimiento lo más pronto posible de lo que ocurrió”.