Hoy en día en cada entidad federativa de nuestro país hay una gran cantidad de ciudadanos que utilizamos como medio de transporte la bicicleta para trasladarnos de un lugar a otro, es por ello, que se ha ido trabajado en distintos estados de la república para mejorar esos espacios y que los ciclistas se sientan más seguro en su traslado de un lugar a otro, aunque debo decirlo, en Michoacán se carece bastante de una ciclovía, en la que pueda ser mucho más segura, sin poner en riesgo la vida de muchos ciclistas. Además, no se ha logrado disminuir el número de muertes por accidentes viales, a pesar de las campañas de educación y prevención vial, la cifra de muertes de peatones y ciclistas continúa en aumento, muchos de estos accidentes son resultado de excesos de velocidad y de distracción.
Hemos visto, por otro lado, que nuestra autoridad municipal y estatal han descartado la bicicleta como opción de transporte y por otro lado la ciudadanía, viendo el peligro que representa todos los días para transportarse en bicicleta, opta por pagar y apretarse en las combis y en los camiones o bien endeudarse por años para llegar a obtener un vehículo y circular a vuelta de rueda por la ciudad.
Ahora las cosas comienzan a revertirse, las bicicletas se utilizan por los diferentes estratos sociales y es su versatilidad lo que las posiciona como opción ventajosa a la hora de servir como medio de transporte multimodal; es por ello, que la bicicleta retoma un nuevo impulso, damos cuenta de una disputa desigual, en la que el coraje, la frustración y la agresión se hacen presente entre automovilistas y ciclistas.
Tan es así, que ya se está volviendo cotidiano el advertir eventos de verdaderos ataques a los ciclistas. Dos claros ejemplos recientes y que además, fueron muy vistos en redes sociales y en periódicos nacionales fueron los de LordAudi y LordDodge.
El primero fue un caso ocurrido el mes pasado en el que el conductor de un auto acosó a un ciclista, invadió el carril exclusivo para bicicletas para luego arrollarlo, por lo que la bicicleta quedó debajo del auto. Luego agrede a un oficial de policía y huye llevando arrastrando una bicicleta del sistema ECOBICI y el segundo fue un caso en el que el conductor de una camioneta, embistió, agredió y además lanzó la bicicleta a un ciclista en calle de la colonia Polanco.
Estos dos casos muestran que además de poner en riesgo la vida de los ciclistas, incrementan las lamentables estadísticas, las cuales son las siguientes:
El año pasado se registraron 17 muertes de ciclistas en la Ciudad de México, de acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México.
En el mismo periodo, los accidentes registrados en los que participó algún ciclista fueron de 207. De acuerdo con la ONG Bicitekas A.C., los accidentes en los que se ve involucrado un ciclista se incrementaron en un 133% en los últimos diez años.
Estaría bien, que pudiéramos llegar a entender todos los mexicanos de esta situación y en verdad tomaramos conciencia de los riesgos que genera “aventarles el carro” así como no respetar las correspondientes ciclovías. Ya que esto llega a generar o producir violencia, agresiones y riesgos mortales para los ciclistas.
Hago votos, para que todos los conductores de vehículos de motor tomen conciencia del enorme riego que día con día pasamos los ciclistas para poder llegar bien a nuestros diferentes destinos, y en verdad pongámonos en los zapatos de ellos que nada nos cuesta, llegar a respetar su espacio de transito.
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