Segob lleva al Vaticano carta invitación a México para el papa León XIV
Foto: X | Rosa Icela Rodríguez

La secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, lleva al Vaticano una carta de invitación a México para el Papa León XIV, extendida por la presidenta Claudia Sheinbaum.

Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación de México, anunció en su cuenta oficial de X sobre su reciente visita al Vaticano.

Este viaje se realizó a pocas semanas de la elección del nuevo papa, León XIV, quien asumió el liderazgo tras el fallecimiento de Francisco.

Durante su estancia, Rodríguez se reunió con Alberto Medardo Barranco Chavarría, embajador de México ante la Santa Sede, y asistió a la ceremonia masiva dirigida por el nuevo Papa León XIV al inicio de su pontificado.

Invitación a México

La secretaria también reveló que llevó consigo una carta de invitación de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, extendiendo al pontífice una invitación para visitar México, una iniciativa que la mandataria había mencionado previamente en una conferencia matutina, donde explicó que no asistiría personalmente a la ceremonia.

“Agradecemos al embajador de México en la Santa Sede, Alberto Barranco Chavarría, su anfitrionía. Acudimos al Vaticano para participar en la ceremonia masiva encabezada por el nuevo Papa León XIV en el inicio de su pontificado y traemos carta invitación de la Presidenta Claudia Sheinbaum para visitar nuestro país”, compartió Rodríguez en sus redes sociales.

La ceremonia de inicio de pontificado, celebrada el 18 de mayo, contó con la presencia de jefes de Estado y representantes de gobiernos de diversas naciones.

El 8 de mayo, el cardenal estadounidense Robert Prevost fue elegido como el nuevo pontífice bajo el nombre de León XIV, sucediendo al papa Francisco.

En el cónclave participaron dos cardenales mexicanos: Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara, y Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México.

México, con aproximadamente 111 millones de católicos, es el segundo país con más fieles en el mundo, superado solo por Brasil, que tiene cerca de 170 millones de católicos.