México avanza en las negociaciones arancelarias con EU, buscando eliminar tarifas y mejorar su posición frente a Canadá y Brasil, señaló Marcelo Ebrard
Ciudad de México.- Según Marcelo Ebrard Casaubón, titular de la Secretaría de Economía, México no ha fracasado en las negociaciones con Estados Unidos para eliminar los aranceles sobre productos mexicanos. De hecho, México está en una posición más favorable en comparación con otras naciones.
En una entrevista posterior a la presentación del plan de financiamiento para las industrias del calzado y textil, Ebrard mencionó que el diálogo con la Oficina de Representación Comercial de Estados Unidos (USTR) y el Departamento de Comercio sigue en curso. Esto se produce después de que un grupo de legisladores solicitara a la Cámara de Representantes la eliminación de los aranceles impuestos a Canadá y Brasil, omitiendo mencionar a México.
La carta, firmada por Tim Kaine, Ron Wyden y Rand Paul, señala que el Senado votó para terminar con tres emergencias declaradas por el presidente Donald Trump. Los legisladores instan a la Cámara a seguir el procedimiento de la Ley de Emergencias Nacionales y votar sobre las resoluciones, ya que consideran que los aranceles exceden la autoridad presidencial.
Ebrard destacó que México tiene mejores condiciones que Brasil y Canadá, ya que los fundamentos para imponer aranceles son diferentes. Para Brasil, el 50% de los aranceles se fundamenta en medidas de emergencia, mientras que para México se basa en la sección 232 de la Ley Comercial de 1962.
“No es que haya fallado el diálogo, nosotros estamos negociando con el ejecutivo. Canadá hoy tiene una situación un poquito más difícil que nosotros en cuanto a aranceles. Nosotros tenemos ligeramente una situación mejor”, afirmó.
Ebrard reiteró: “Nosotros estamos trabajando con la USTR y Comercio con el propósito de que tengamos los aranceles menores respecto a otros países, no hay falla de México”.
Además, comentó que las consultas en México sobre el T-MEC ya concluyeron, al igual que en Estados Unidos. Está previsto que en enero el gobierno estadounidense presente su informe al Congreso, mientras que en México se entregará al Senado, aunque ya se le presentó un resumen a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.


