Reporta SSP barricadas de presuntos civiles armados en Nuevo Urecho
Foto: Raúl Tinoco/Contramuro

Nahuatzen, Michoacán.- De sólo tres policías es el cinturón de seguridad en el municipio de Nahuatzen, sin importar que esta localidad se haya visto envuelta en importantes conflictos delictivos a cargo del grupo criminal denominado Los Viagras, con su jefe de plaza Benito Morales, alias “El Beny”.

Se sabe también que actualmente la Secretaría de Seguridad Pública tiene contratados a 19 policías para el resguardo Nahuatzen, sin embargo, 16 de éstos fueron trasladados a Uruapan, en respuesta a un conflicto suscitado entre los uniformados y habitantes de la localidad indígena.

Este panorama fue expuesto por el diputado emanado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Wilfrido Lázaro Medina, quien este miércoles sostuvo una reunión con comuneros preocupados por la inseguridad que impera en Nahuatzen.

“Se hizo un compromiso para que la misma comunidad enviara jóvenes o personas hasta en un número de 30 para que sean contratados por la Secretaría de Seguridad Pública y después de ser capacitados, con sus exámenes de control de confianza, puedan ser la seguridad de la propia comunidad”, argumentó el legislador priísta.

Aunado a ello detalló que, “al día de hoy tienen 19 contratados y de esos 16 se fueron a Uruapan y por eso están en estado de indefensión total”.

Explicó que los 16 uniformados que se reubicaron en Uruapan, lo hicieron luego de haber sido acusados de agredir a una mujer originaria de Nahuatzen, “hay quienes dicen que los corrieron, otros que por su propia cuenta se fueron”.

Al ser abordado sobre si la falta de seguridad que enfrenta Nahuatzen podría responder a un “castigo”, por los hechos ocurridos recientemente en Arantepacua -comunidad perteneciente a este municipio-, el diputado evitó emitir un argumento en torno a ello, pero denotó preocupación en caso de que así fuese.

Al aterrizar sus argumentos, Wilfrido Lázaro se comprometió a dar seguimiento a este caso, en su carácter de presidente de la Comisión de Seguridad del Congreso, a fin de resarcir el tejido social de Nahuatzen.