Michoacán destaca por sus productos con Indicación Geográfica, impulsando su autenticidad y tradición en mercados globales.
Morelia, Michoacán.- Michoacán se distingue por su extraordinaria riqueza artesanal, natural y productiva, lo que ha permitido que diversos productos emblemáticos del estado cuenten con figuras de protección como las Indicaciones Geográficas, que la tienen las Catrinas de Barro de Capula y el Cobre Martillado de Santa Clara del Cobre, así como la charanda de Uruapan, el mezcal y tequila de Michoacán cuentan con la Denominación de Origen.
La Denominación de Origen requiere que todas las fases de producción, transformación y elaboración de un producto se den en una misma región, con una especialización reconocida y comprobada; mientras que la Indicación Geográfica exige que al menos una fase del proceso se realice en el área definida y tenga una cualidad ligada a su origen.
Para el mes de octubre, durante la Bienal de oriGIn 2025, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) entregará las Indicaciones Geográficas del molcajete de San Nicolás Obispo, la esfera de Tlalpujahua, el pez blanco de Pátzcuaro, la guayaba del oriente y la jamaica de La Huacana.
Estas figuras de protección son fundamentales para impulsar la competitividad de los productos locales en mercados nacionales e internacionales, al garantizar su autenticidad, ya que se protege también el conocimiento ancestral y las prácticas tradicionales que han sido transmitidas por generaciones en las comunidades michoacanas.
El Gobierno del Estado, en coordinación con productores, instituciones y organismos nacionales, continúa promoviendo el reconocimiento de nuevos productos con potencial de obtener estas distinciones, asegurando así que el valor de lo hecho en Michoacán trascienda fronteras y contribuya al bienestar de sus habitantes.