Un fracaso más para el futbol mexicano, luego de que el Tri Sub-23 que defendería el oro conquistado hace cuatro años en Londres 2012, no avanzó ni siquiera de la primera fase, tras perder por el mínimo 1-0 ante Corea del Sur en duelo de la tercera jornada del Grupo “C”, celebrado en el estadio Mané Garrincha de Brasilia.
Los coreanos necesitaban solamente de un empate para avanzar a los Cuartos de Final y sin un juego espectacular, pero si efectivo doblegó a los mexicanos con la solitaria anotación de Chang-Hoon Kwon al minuto 76.
Con este resultado, Alemania, que goleó a Fiyi 10-0, avanzó igual que el conjunto de Corea y se medirán a Honduras y Portugal en cuartos de final, respectivamente.
Fue un juego en el que la selección nacional sin poder ofensivo le termina por pesar las ausencias por lesión de Uribe Peralta y Rodolfo Pizarro, México sin efectividad y contundencia fue echado prematuramente de los Juegos Olímpicos de Río en el que buscaban refrendar lo realizado hace cuatro años.
El “cepillo” Peralta y Pizarro, fueron pieza clave en el funcionamiento del entrenador Raúl Gutiérrez, pero en el partido anterior ante Fiji, terminaron lesionados con fractura de nariz y peroné, respectivamente que los hizo abandonar a la selección para atenderse en México.
En el trámite del partido fue una lucha cerrada y en la que México no supo descifrar los dos bloques ofensivos que le presentó el conjunto de Corea que se replegó, tapó los costados y basó sus ataques al contragolpe, sabedores que el empate les permitía avanzar.
En la segunda parte México generó más ocasiones a través de Bueno, Torres y Cisneros pero no tuvieron la efectividad para doblar el arco rival.
Corea del Sur agazapado, aguantó, aguantó y destruyó el juego de México. Pero con un fugaz contragolpe puso fin a la tregua y con un potente disparo sobre el pico del área de Chang-Hoon Kwon, acabó con las aspiraciones de los nacionales al minuto 77, en fuerte zurdazo que dejó sin oportunidad a Alfredo Talavera.
México al final jugó a la desesperada y algunos jugadores sin sacar el pecho y el orgullo no mostraron su nivel. Uno de ellos, “Chuky” Lozano quien fue expulsado debido a la frustración del resultado, tras agredir a un contrario que hacia tiempo con la pelota en la banda.
Y así México vestido de negro terminó sepultando todas las esperanzas de refrendar de oro conseguida en Londres 2012, un total fracaso en unos Juegos Olímpicos en los que el país sigue sin conquistar al menos una medalla.
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