Trasladan a prisión al actor Pablo Lyle; estaría de 9 a 15 años
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En 2019, Pablo Lyle protagonizó un altercado vial que le ocasionó la muerte a un hombre de la tercera edad; lo trasladan a prisión

Pablo Lyle fue trasladado a la cárcel, luego de ser declarado culpable por el homicidio involuntario del cubano Juan Ricardo Hernández de 63 años; lo que pone fin a su arresto domiciliario.

El actor mexicano permanecerá en prisión hasta que se sepa cuál será su condena el próximo 26 de octubre.

A 3 años de estar en con arresto domiciliario (debido al atraso en su juicio por la pandemia de la covid-19), la defensa de Lyle pidió que ese tiempo sea tomado en cuenta para determinar su sentencia.

Sin embargo, durante la audiencia celebrada el pasado 4 de octubre, el fiscal solicitó la pena máxima para el actor, que sería de 15 años en la cárcel.

La jueza, Marisa Tinkler Méndez, reconoció que Pablo Lyle tuvo un buen comportamiento mientras estaba con arresto domiciliario, por lo que podría considerar que su condena se reduzca a 9 años en prisión.

La jueza Marisa Tinkler Méndez dando instrucciones finales a los miembros del jurado para que puedan deliberar sobre el caso de Pablo Lyle.

El actor no testificó en su audiencia

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El actor mexicano, comunicó el pasado lunes a la jueza Marisa Tinkler, al frente del caso en la Corte Criminal de Miami-Dade, que por iniciativa propia y bajo el consejo de sus abogados no testificaría en la audiencia, según divulgaron medios locales.

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La defensa presentó partes de una declaración del actor, en la que señalaba que era la primera vez que se veía envuelto en una situación como esa y que lo hizo para proteger a su familia.

Lyle condenado por un incidente de tránsito

El forense indicó que cuando fue examinado el cadáver del cubano, se comprobó que había sufrido una hemorragia en la parte frontal y posterior de la cabeza.

Esto provocado por la caída que sufrió cuando Lyle le dio un puñetazo en la cara.

Al escuchar el veredicto, Pablo Lyle abrazó a su familia con una profunda tristeza, le tomaron sus huellas dactilares y siendo esposado nuevamente, fue llevado a una prisión.