Venezuela afirma abordaje ilegal de navío

El gobierno venezolano denuncia el abordaje ilegal de un navío estadounidense en sus aguas, señalando una escalada bélica en el Caribe.

El gobierno de Venezuela ha denunciado que un destructor de Estados Unidos abordó y ocupó ilegalmente durante ocho horas una embarcación venezolana con nueve pescadores en aguas nacionales. Según Caracas, esta acción busca justificar una escalada bélica en el Caribe.

“El día de ayer una embarcación de pesca atunera venezolana (…) fue de manera hostil abordada por una unidad de la Marina de guerra de los Estados Unidos, una unidad militar (…), el destructor ‘Jason Dunham’, matrícula DDG-109, equipado con importantes armas, misiles, hombres, efectivos militares con armas de guerra”, afirmó el canciller venezolano, Yván Gil, en un pronunciamiento transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV).

Gil añadió que “el navío de guerra desplegó dieciocho efectivos con armas largas que abordaron y ocuparon la pequeña e inofensiva embarcación (…), impidiendo la comunicación y el normal desenvolvimiento de los pescadores que cumplían faena autorizada de pesca de atún”.

Los pescadores, según el comunicado, eran “humildes pescadores atuneros, que navegaban a 48 millas náuticas de la Isla de La Blanquilla, en aguas pertenecientes a la Zona Económica Exclusiva (ZEE) venezolana”.

El Gobierno venezolano afirmó que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana monitoreó el incidente constantemente, utilizando sus medios aéreos, navales y de vigilancia, acompañando a los pescadores hasta su liberación.

Para el gobierno de Nicolás Maduro, este evento “refleja la conducta bochornosa de sectores políticos en Washington que, de manera irresponsable, comprometen recursos militares de altísimo costo y soldados entrenados como instrumentos para fabricar pretextos de aventuras bélicas”.

Venezuela exigió a Estados Unidos que “cese de inmediato estas acciones que ponen en riesgo la seguridad y paz del Caribe”, instando a los estadounidenses a “reconocer la gravedad de estas maniobras y rechazar la utilización de sus soldados como piezas de sacrificio para sostener los deseos de una élite codiciosa y depredadora”.

Estados Unidos tiene desplegados cerca de las costas venezolanas ocho barcos militares con misiles y un submarino de propulsión nuclear, además de haber enviado diez aviones de combate F-35 a una base en Puerto Rico, lo que Venezuela denuncia como un intento de propiciar un “cambio de régimen”.

El gobierno de Donald Trump acusa a Maduro de liderar el denominado Cartel de los Soles, señalado por Estados Unidos como una organización terrorista presuntamente vinculada al narcotráfico, lo que ha motivado la movilización militar en el Caribe y el aumento a 50 millones de dólares de la recompensa por información que permita la captura del líder chavista.