Foto: Ismael Díaz

Lejos de la tristeza y más bien en un ambiente de alegría, los habitantes de Cuanajo, Michoacán, celebran a sus difuntos, sí, celebran a la muerte con música y baile. En esta comunidad la tradición los lleva a preparar grandes fiestas regularmente con banda y las familias preparan todo tipo de alimentos para quienes con ellos, ayudarán a sus difuntos a regresar aunque sea por un momento a disfrutar de lo que en vida apreciaron más.

En Cuanajo, se tiene la tradición de elaborar caballitos de madera adornados con flores y además les colocan frutas y las bebidas preferidas de los difuntos, pues para ellos, el caballo les llevará la ofrenda hasta donde se encuentren. Además de ello, quien quiera visitar la casa de alguno de ellos, deberá llevar una ofrenda, ya sea un caballito, pan, fruta, piloncillo o bien, una veladora que “ilumine su camino”.

https://youtu.be/XYHUloJS7hI

Por otro lado, se distingue en el video un camposanto, es en la comunidad de Tzurumútaro, aquí, la celebración es más solemne. Las familias se reúnen en el panteón y adornan sus tumbas con flores de cempasúchil y luminarias. A diferencia de Cuanajo, no se escucha un ambiente de fiesta, salvo en aquellas lápidas en donde la familia desea llevar un poco de música para amenizar el regreso de los muertos a la tierra.


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Ireri Piña es licenciada en Periodismo, reportera de Educación, Turismo, multifuente. Contadora de historias y causas sociales; michoacana, moreliana