Fernando Rodríguez Doval lo dijo sin decirlo. Al vocero del PAN le bastó citar los estatutos: Si el expresidente Felipe Calderón apoya la candidatura independiente de Margarita Zavala, lo que seguramente ocurrirá, automáticamente quedaría fuera del partido.
Pero de inmediato aclaró: “no estamos en plan de correr gente, sino de sumar”.
Lo mismo aplica para Cordero, Gil, Lozano, Vega y Lavalle. Los llamados “senadores rebeldes”.
En el CEN hay disposición de dialogar. Saben que el PAN necesita de todas sus fuerzas en 2018. “Ricardo (Anaya) está haciendo política”, asevera el vocero. Y habla de una discreta “operación cicatriz” en el seno de Acción Nacional.
“Me da pena verlos así (a los rebeldes). Es gente inteligente, valiosa. Algunos son mis amigos”, puntualiza.
Rodríguez Doval nos dice también que el objetivo del Frente Ciudadano por México es ganar el voto de los que quieren el cambio, pero no con Andrés Manuel López Obrador.
Está convencido de que la coyuntura los favorece. Cita la encuesta de Mitofsky que da una ventaja de cinco puntos a la alianza PAN-PRD-MC sobre la de Morena-PT, y de seis sobre la del PRI-PVEM.
La empresa que dirige Roy Campos dice que al desaparecer Margarita como aspirante del PAN, la militancia panista pone a Ricardo Anaya como favorito para la candidatura presidencial, con 54 por ciento de las preferencias. “Es el doble de lo que logra Rafael Moreno Valle”, puntualiza Mitofsky.
- Ricardo Monreal ya se sentó con Ricardo Anaya, con Dante Delgado y con Miguel Mancera para tratar el tema de su posible postulación a jefe de Gobierno por el Frente Ciudadano por México.
La única que no ha buscado reunirse con el delegado en la Cuauhtémoc es Alejandra Barrales. Comprensible: la presidenta nacional del PRD quiere ser alcaldesa de la Ciudad de México y Monreal representa competencia interna.
Ayer publicamos aquí que la senadora no tiene la menor intención de bajarse de la contienda interna. Las encuestas que ella tiene la animan. Va con todo.
En el entorno del exgobernador de Zacatecas nos dicen también que don Ricardoenfrenta un “dilema”: irse o quedarse en Morena.
Es público que AMLO le pidió no irse con “la mafia en el poder”. Ya hasta le enseñaron el espejito de la Secretaría de Gobernación (en caso de triunfo de Andrés) para que se olvide de la “encuesta patito” que lo dejó sin la candidatura de Morena a jefe de Gobierno.
El jefe máximo de Morena y el delegado en la Cuauhtémoc ya sostuvieron una conversación telefónica. Todavía no hay fecha oficial para el encuentro, pero seguramente será en el curso de la semana que entra, nos dicen en el entorno de Monreal.
- Nos cuenta Eduardo Bohórquez, director de Transparencia Mexicana, la indignación que sintió cuando, hace años, la revista Forbes incluyó a El Chapo Guzmán en la lista de los más ricos del mundo. Dinero mal habido colocaba al narcotraficante codo a codo con poderosos empresarios del orbe.
Enseguida abrió su portafolio y nos entregó un ejemplar de la revista Expansióndel mes de noviembre. En sus páginas centrales publica un extenso reportaje sobre la política anticorrupción de las 500 empresas más importantes de México.
“El 62 por ciento de las empresas no tienen una política anticorrupción”, nos comentó Bohórquez.
Las 500 empresas representan ventas anuales por 15 billones de pesos. La revista dice que para evitar sanciones o agilizar trámites, muchas de ellas prefieren pagar dádivas, propinas o sobornos a quedarse sin un contrato, una licencia o un permiso.
Expansión cita una encuesta realizada por el Inegi que calcula en mil 694 millones de pesos anuales el costo de las dádivas.
Los sectores más opacos son la hotelería, los servicios inmobiliarios, la vivienda. Aeroespacial, afores y minería destacan con las políticas anticorrupción más transparentes.
La adopción de buenas prácticas anticorrupción impacta positivamente en la cadena de producción, en los socios, proveedores y distribuidores, según Mexicanos contra la Corrupción, Transparencia Mexicana y Expansión.
- Mal les ha ido a los legisladores por haberse otorgado una semana de puente por el Día de Muertos. Los pendientes no faltan, pero las ganas de vacacionar sobran. Las críticas en medios y redes les llueven.
Hay que consensuar el Presupuesto de Egresos, retomar los temas del fiscal general y fiscalías especializadas; elegir a magistrados de las salas anticorrupción, trabajar en la Ley de Seguridad Interior. Pero el amor a sus “muertitos” es el pretexto para aplazar el trabajo legislativo.
Afortunadamente hay algunos que no aprueban tanto asueto. Uno de ellos es el diputado Agustín Basave, expresidente nacional del PRD. El hombre acaba de presentar una iniciativa en San Lázaro para ampliar los periodos de sesiones y tener dos meses más de sesiones. “Es vergonzoso tener cuatro meses de receso en verano”, nos dijo.
Propuso, además, sesionar martes, miércoles y jueves. Una sesión, la del miércoles, se dedicaría a la agenda política.
Se ve difícil. Esta legislatura no debate. Prefiere planchar todo en la Junta de Coordinación Política, órgano de gobierno en las cámaras, puntualizó.