Cuando la muerte ronda
El asesinato de Yolanda Sánchez Figueroa, alcaldesa de Cotija en Michoacán, ocurrido la noche del pasado tres de junio, viene a sumarse a una larga lista que arrastra la entidad de homicidios de ediles en funciones o que han dejado el cargo.
En las dos últimas décadas el estado acumula un total de 31 ediles y exediles asesinados, la mayoría por arma de fuego, aunque también hay quienes han sido ultimados a machetazos, pedradas, golpes o simulando accidente.
La de Cotija es la segunda mujer asesinada en Michoacán que ha ejercido las funciones de presidenta municipal. En 2012, luego de dos intentos previos para quitarle la vida, María Gorrostieta Salazar exalcaldesa de Tiquicheo, fue ultimada a golpes, su deceso fue diagnosticado por traumatismo craneoencefálico y su cuerpo fue localizado en un paraje del municipio de Cuitzeo
Previo a su homicidio, Yolanda Sánchez había sufrido un secuestro. Fue el 15 de septiembre de 2023 cuando a la salida de un centro comercial en Zapopan, Jalisco, un grupo de hombres armados le cerraron el paso al coche en que viajaba y se la llevaron. La presión pública hizo que fuera liberada por sus captores 11 días después en el municipio de Villamar.
Pese a ello la munícipe sólo fue proveída por un elemento de seguridad para su protección, el cual, fue ultimado junto con ella el pasado lunes. La dirigencia de su partido, el PAN, le había ofrecido la candidatura a la diputación local de Los Reyes, para que con ello pudiera salir de Cotija, sin embargo, los jaloneos políticos al interior de ese partido la dejaron con las manos vacías y su caso pronto dejó de ser de interés de su partido.
Con la vida de Yolanda Sánchez el PAN pagó el triunfo electoral que obtuvo el pasado dos de junio en Cotija por la presidencia municipal, pues la alcaldesa solicitó que para el día de la jornada electoral se reforzara el municipio con elementos de seguridad, lo que habría impedido la operación prevista por los grupos delincuenciales que tenían su apuesta con otro gallo distinto al que ganó.
Con el homicidio de la alcaldesa, suman ya cuatro los casos de presidentes municipales asesinados en el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla, los otros tres son los de Enrique Velázquez Orozco de Contepec y César Arturo Valencia Caballero de Aguililla en 2022, así como el de Guillermo Torres Rojas de Churumuco, ocurrido el pasado 30 de marzo.
Durante la administración de Silvano Aureoles Conejo fueron cinco los alcaldes asesinados y ocho exalcaldes; con Salvador Jara un alcalde; con Fausto Vallejo dos alcaldes y tres exalcaldes; con Leonel Godoy, tres alcaldes y tres exalcaldes; y con Lázaro Cárdenas Batel un alcalde.
Habrá que ver cuántos más se acumulan en lo que resta del actual sexenio estatal.
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Encueraditos
Los resultados de la jornada electoral del domingo, dejaron encueraditos a los dirigentes estatales del PRI y del PRD, Guillermo Valencia Reyes y Octavio Ocampo Córdova respectivamente, al evidenciar que para ellos lo primero fue salvar el pellejo.
Ambos se aseguraron de ocupar una curul de representación proporcional en la próxima Legislatura local, sin importar el destino de sus respectivos institutos políticos. Pese a no ganar sus partidos ninguna diputación de mayoría, ambos serán premiados para vivir del erario público los próximos tres años.