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Caso Fermina Arellano Montero, cuando violencia política salta a intento de feminicidio

Morelia, Michoacán.- La violencia política es una realidad creciente en Michoacán, la participación de las mujeres en el ámbito público conlleva riesgos que escalan hacia violencias mayores, como lo es el feminicidio.

Fermina Arellano Montero lo sabe bien, a principios de marzo pasado mientras ella se disponía a dormir, un sujeto irrumpió en su casa buscando apuñalarla. Tres meses después no hay investigación, el asunto permanece sin resultados y ella ha debido abandonar su hogar buscando protegerse.

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En el ámbito político estatal Fermina es conocida de tiempo atrás por su militancia priista; ahora desde el ámbito de la sociedad civil, con su organización Red de Mujeres Municipalistas Leonas de la Corregidora se ha enfocado a la atención de asuntos relacionados con violencia a las mujeres.

Fue hasta esta semana que determinó hablar de lo que le ocurrió, lo hizo primero en la primera sesión ordinaria del Observatorio de la Participación Política de las Mujeres en Michoacán, y posteriormente en entrevistas.

A Fermina no le cabe duda que lo ocurrido el seis de marzo se debe a su activismo, ya que su agresor le hizo saber que iba por ella.

“Como a las nueve y media de la noche, yo estaba en mi cuarto viendo una película a punto de dormir. A la casa entró una persona joven, como de unos 29 años más o menos, abrió la puerta de mi habitación y se metió”.

El lugar que habita Fermina forma parte de una especie de condominios que comparten con vecinos, por lo que generalmente las puertas no están cerradas con llave.

“Yo siempre tengo la puerta abierta porque mi hijo llega a cenar, ese día como ya estaba oscuro prendí la luz y fue que vi que no se trataba de mi hijo. Primero el sujeto volteó, me vio y me dijo ‘ay, me equivoqué”, yo le dije, ‘sí muchacho te equivocaste’, me preguntó mi nombre y se lo dije, yo pesé que era un ratero.

“Ya que le dije mi nombre me respondió que lo habían mandado por mí, sacó un cuchillo y me dijo que me acostara, que siguiera tapada y no me moviera; yo me espanté, traté de conservar la calma y le pregunté quién lo había mandado y qué quería de mí, me respondió ‘me mandaron a cortarte’, y estaba nervioso, entonces levantó el cuchillo y me pegó”.

Ella narra cómo buscó defender mientras sentía como el cuchillo la picaba en diferentes partes de su cuerpo, “tengo siete perforaciones”.

En el forcejeo Fermina cayó a un lado de su cama provocando que se quebrara una luna grande de espejo que había en su cuarto, el ruido hizo que su atacante saliera huyendo, y que sus vecinos fueran alertados.

“Yo grité y salieron los vecinos a apoyarme, fue grave, me pinchó el pulmón por lo que paré en el hospital en donde permanecí cuatro días”.

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La Fiscalía General del Estado acudió a tomar la declaración de Fermina para levantar la denuncia correspondiente, misma que no fue catalogada como intento de feminicidio sino como intento de homicidio calificado.

“Fueron a mi casa para levantar evidencias, incluso un video de seguridad en donde aparece el muchacho, pero nadie lo conoce, hasta el momento no hay avance en las investigaciones, no hay nada, las instituciones han sido muy lentas en términos del apoyo, todos dicen que van a apoyar pero no ha pasado nada”.

Patricia Monreal ejerce el periodismo desde 1996 en Michoacán, México. Ha laborado y colaborado en diferentes medios nacionales y locales, así como en proyectos independientes tanto en investigación, como reportera, editora, columnista, caricaturista...