Lázaro Cárdenas
Foto: Cortesia/Gerardo A. Herrera Pérez.

Sin duda alguna es importante impulsar acciones con los padres de familia para fortalecer el ambiente familiar y escolar. Los ejes que resultan de mayor relevancia continúan siendo aquellos que tienen relación con las socioemociones, el manejo de las reglas y la disciplina con los hijos, pero sobre todo aquellos temas relacionados con la búsqueda de acciones para la resolución de conflictos.

Los padres, los maestros y desde luego los alumnos, construyen sobre el eje del centro escolar, construyen y diseñan metodologías para la enseñanza aprendizaje, para las acciones de educación extraescolar, pero también acciones que les permitan fortalecer los mejores niveles de convivencia escolar.

Michoacán ahora cuenta con un Programa Estatal para el Impulso de la Convivencia Escolar que permitirá ir fortaleciendo la educación para la paz, la convivencia, el impulso a los valores; pero no solamente ello, también se requiere la más amplia participación de los distintos actores que deben intervenir para consolidar un proyecto de paz, para la convivencia escolar y social, docentes, padres y alumnado.

El Programa Estatal para el Impulso de la Convivencia Escolar es un instrumento de política pública en materia de educación, con enfoque preventivo y formativo que consiste en el diseño y la elaboración de materiales didácticos para apoyar el trabajo académico que maestros y alumnos realizan en el salón de clase, pero que adicionalmente podrán utilizar también los padres de familia; dentro de la estrategia del Programa Nacional de Convivencia Escolar se cuenta con el “Manual de trabajo para talleres para madres, padres y tutores”, donde me ha tocado participar tanto en Cuitzeo como en Santa Ana Maya, y hoy también en Lázaro Cárdenas.

Y es que para la construcción de una convivencia pacífica, incluyente y democrática no sólo en las escuelas, sino en todos los sitios donde conviven seres humanos, se requiere de la participación informada y activa de todas las personas.

Para llevar a cabo estas acciones con los padres de familia en general y no sólo con las madres de familia, se han dispuesto del manejo de varios temas que son fundamentales para la creación y desarrollo de conciencia social.

Los temas son fortalecimiento de la autoestima, el manejo de las emociones, así como el establecimiento de reglas y límites, y desde luego la parte medular, que es la resolución de conflictos en la familia de manera asertiva.

Si en el hogar donde se forman los valores de los niños, logramos que éstos lo reproduzcan en los espacios escolares, estaremos ganando todos.

Y es que lo que somos se debe a la relación que mantenemos con los demás y la forma como nos vinculamos con el medio que nos rodea, no solamente el social, también la naturaleza. Así debemos entender que la convivencia forma parte de una necesidad humana, y que se debe dar a partir del diálogo, de la tolerancia, el respeto, la inclusión, y que todo ello nos permitirá arribar a la paz.

Por ello, una de las instituciones sociales: la escuela, es un espacio de relaciones “donde se espera que los alumnos, además de alcanzar el logro de habilidades cognitivas, desarrollen habilidades sociales y emocionales que les permitan establecer relaciones armónicas, pacíficas e inclusivas dentro y fuera de ésta. La convivencia es un aprendizaje. Aprender a convivir es una tarea educativa primordial ya que representa una plataforma para el crecimiento personal y social”.

La directora de la Escuela Primaria Expropiación Petrolera, Verónica Reyes García, enclavada en la ciudad y puerto de Lázaro Cárdenas, quien ha venido desarrollando un liderazgo al frente de la educación básica en Michoacán, y claro, en Lázaro Cárdenas, viene promoviendo la sensibilización, concientización y adquisición de habilidades que permitan el manejo de herramientas a las madres, padres y tutores para mejorar la convivencia tanto en la escuela como en la familia.

La participación en este modelo de intervención no me es ajena, toda vez que de manera anual he venido colaborando y formando a padres y madres de familia en un esquema de convivencia en dicho centro escolar. Con gran entusiasmo, siempre acompañado también de la presidenta de la asociación de padres de familia, señora Griselda Leal Gómez, y los directivos, con quienes hemos trabajado de la mano para hacer de este centro escolar un modelo de atención para Michoacán.

En días recientes tuve la oportunidad de coadyuvar a los procesos de formación de los padres, madres y tutores cuyos hijos e hijas se encuentran como alumnos de esta institución. Ahí desarrollamos una metodología para que dichos padres cuenten con las herramientas para fortalecer la autoestima y el manejo de la familia, establecer los mecanismos de reglas y límites de la familia, así como manejar la mediación para la resolución de conflictos, todo ello en el marco de una escucha asertiva.

Lo objetivos del taller fueron dotar a los padres y tutores de las herramientas para fortalecer la autoestima y el manejo de las socioemociones en la familia, mostrar los mecanismos para establecer las reglas y límites en la organización familia, así como avanzar en el conocimiento y utilización de las herramientas para resolver los conflictos de manera asertiva.

Para llevar a cabo la realización de estos objetivos se llevó a cabo la conferencia sobre el “Control y disciplina del cuerpo y el proceso de cambio de los deberes por los acuerdos de convivencia”, además de participar en los talleres de “Autoestima y manejo de emociones en la familia”, “Establecer reglas y límites en la familia” y “La familia. Aprendo a resolver los conflictos de manera asertiva”.

Termino mi comentario con la siguiente reflexión: para la resolución de conflictos se requiere de dialogar, de crear los espacios para el debate de las ideas y los espacios familiares para la convivencia, se requiere de un buen mediador, se requiere de evitar la violencia para resolver conflictos. Debemos entender que la familia es importante, que la familia es un equipo, que tenemos que privilegiar las reglas de comunicación. A los hijos hay que brindarles confianza y credibilidad.

Lázaro Cárdenas continúa trabajando en favor de la inclusión y el respeto por la diversidad cultural.