Estamos tan habituados a ver en notas sobre bombardeos, conflictos armados y guerras en los medios de comunicación, que frecuentemente perdemos la noción del impacto real que éstos eventos tienen sobre miles de personas.
Es hasta que surgen videos como el que estamos por presentarles, cuando nos damos cuenta de lo cruel que puede ser una guerra. Estas imágenes fueron grabadas en Aleppo, donde frecuentemente se dan enfrentamientos entre el régimen de Bashar Al Assad y grupos rebeldes. Fue en esta ciudad al sur de Siria donde tras un bombardeo los rescatistas se encontraron con Ahmad, un niño de 11 años que estaba atrapado entre los escombros de un edificio.
Adolorido y confundido por lo que ocurría a su alrededor, Ahmad suplicaba a los rescatistas que le dieran agua y lo sacaran de ahí. Tras más de una hora finalmente pudo ser liberado, aunque por desgracia el resto de sus familiares (papás, hermanos, abuela) fallecieron en este bombardeo realizado por el régimen de Al Assad en coordinación con las fuerzas rusas.
De acuerdo al Observatorio Sirio de Derechos Humanos, desde el pasado lunes se han realizado por lo menos 50 bombardeos en áreas de Aleppo supuestamente controladas por la oposición. Se estima que son más de 650 las personas que han muerto (de las que 130 son niños) por ataques del régimen en bombardeos desde el pasado 22 de abril.
De esas notas que nos dejan con el ánimo por los suelos, por fortuna Ahmad pudo ser rescatado.
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