Deschamps y la corrupción
Foto. Cortesía

Por: Enrique Rivera Hernández

El tamaulipeco Carlos Antonio Romero Deschamps, inicio con su carrera política como miembro activo del PRI a partir del año de 1961, coordinando campañas políticas en su estado natal.

Según sus letras, ingreso a laborar en la empresa paraestatal PEMEX como “trabajador de petróleos mexicanos a la edad de 14 años en 1959… trabajando como peón, ayudante, obrero, chofer, albañil y múltiples actividades más”, sin embargo es necesario analizar su carrera político-sindical con la finalidad de lograr vislumbrar su ascenso al poder y su capacidad de corrupción.

Romero Deschamps dentro del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) inició su carrera en 1971, doce años después a su ingreso, a la edad de 26 años ocupó el cargo de comisionado nacional del sindicato para realizar la revisión del contrato colectivo de trabajo, posteriormente en 1973 fue nombrado presidente de la comisión nacional mixta de seguridad e higiene dentro del Sindicato hasta el año de 1976; de 1976 a 1978 fue jefe del departamento jurídico y de ajustes, pues en 1978 fue nombrado Secretario General de la Sección 35 del STPRM ubicada en el Estado de Hidalgo; en 1980 se desempeñó como asesor del Comité Ejecutivo General, en 1986 como vocal del consejo general de vigilancia, en 1992 secretario del interior y acuerdos. Posteriormente en 1993, después de la destitución por parte de Carlos Salinas de Gortari a Joaquín Hernández Galicia “la quina” emergió como secretario general nacional del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, STPRM.

Es decir, se hizo secretario general del sindicato de la mano del ex presidente Carlos Salinas de Gortari.

A partir de ese momento fue vinculado directamente con los ex presidentes de la República, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, figuras significativas en el periodo corrupto de la historia neoliberal en nuestro país.

Así mismo, es necesario escribir que el mismo Romero Deschamps fue Diputado y Senador plurinominal por las siglas del PRI en cinco ocasiones y que ha sido vinculado también directamente con distintos delitos.

En 2019 fue denunciado ante la Fiscalía General de la República (FGR) por robo de combustible, secuestro, venta de plazas, desvío de recursos, enriquecimiento ilícito, delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita, evasión y defraudación fiscal, peculado y nepotismo.

También es vinculado directamente con el caso de “PEMEXGATE”.

Caso que consistió en enviar 1,500 millones de pesos de fondos sindicales, a la campaña política del entonces candidato a la presidencia de la república por parte del PRI Francisco Labastida en el año 2000.

Actualmente, la Unidad de Inteligencia Fiscal (UIF), tiene dos denuncias en su contra por depósitos por 309 millones de pesos, sin embargo cabe resaltar que quien determinará la procedencia lícita o ilícita de esa cantidad económica será la Fiscalía General de la República (FGR).

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Carlos Romero Deschamps, renuncio a la dirigencia del STPRM el día 17 de Octubre de 2019, siendo el diputado priista Manual Limón Hernández quien ocuparía su vació.

Sin embargo, queda para el análisis; por un lado la construcción del sindicalismo como una fuerza de protección al trabajador en busca del beneficio común, por otro lado el sindicalismo como una potencia política partidista, por un lado más, la democratización de los sindicatos y por último la consecuencia social que deja toda la corrupción realizada por bastos personajes en la historia reciente en nuestro país, como en esta caso es el de Carlos Romero Deschamps.